POR URIEL NAUM AVILA
IberoNews.- En 2021, la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa) se propuso definir una agenda para impulsar políticas públicas en beneficio del desarrollo económico del país centroamericano y, junto con ello, detectar los sectores con mayor potencial de crecimiento.
La misión: tener claridad de cuál debe ser el camino para lograr prosperidad en los siguientes 10 años. La consultora McKinsey colaboró en esta tarea de análisis ‘futurista’, en la que se detectaron, de acuerdo con el director ejecutivo de Fundesa, Juan Carlos Zapata, importantes oportunidades, sobre todo en sectores vinculados con la exportación.
“Nos quedó claro que hay sectores con un gran potencial, pero debemos fomentar las exportaciones, disminuir la burocracia y traer talento de afuera. Es parte de lo que ha derivado en la iniciativa que se de denomina “Guatemala no se detiene”.
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Sectores con potencial
Entre las cosas que descubrió el estudio de McKinsey, es que Guatemala tiene la oportunidad de aumentar las exportaciones en el sector de vestimenta hasta en 3,500 millones de dólares adicionales (mdd), una situación similar sucede en agricultura, silvicultura y pesca.
“Otros sectores que también salieron a relucir fueron el químico, productos alimenticios y caucho. En algunos, las exportaciones podrían crecer hasta 500 mdd en los siguientes 10 años”, comenta Juan Carlos Zapata.
También se detectaron industrias que puede atraer inversiones importantes a Guatemala en el futuro. Algunas de ellos son la farmacéutica, aparatos médicos y equipos electrónicos.
Oportunidades en el contexto
Para el directivo de Fundesa, el actual entorno global puede ser propicio para que estos sectores se detonen en el país centroamericano, ya que “muchas empresas están saliendo de Asia y buscan estar más cerca de Estados Unidos e integrarse a las cadenas de valor con México, principalmente en ramas como la automotriz”.
Sobre esto último, el director ejecutivo de Fundesa apunta que trabajan en la posibilidad de llevar a Guatemala una importante inversión en el sector autopartes que generaría 10,000 puestos de trabajo en los siguientes 5 años.
Los retos de la competitividad en Guatemala
Pero generar todas estas inversiones que pueden detonar miles de empleos implica trabajar en diversas áreas que impactan en la competitividad de Guatemala.
Y es que, si bien el país sobresale en temas como la estabilidad macroeconómica, lo cual es valorado por las calificadoras de riesgo, o bien, el servicio que se brinda a los clientes (eso explica el boom de call centers), también se tienen importantes áreas de oportunidad.
“En temas de capital humano se tiene que invertir más y mejorar las condiciones de salud y formación para el trabajo. Un segundo reto es mejorar la infraestructura. Ya hay priorización de proyectos, pero hay que avanzar más rápido”, menciona el director ejecutivo de Fundesa.
Un tercer aspecto en el que Guatemala debe trabajar, de acuerdo con Juan Carlos Zapata, es el fortalecimiento de la institucionalidad, principalmente “considerando que hay departamentos donde el Estado es muy débil”.
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