POR MARLENE GUTIÉRREZ
IberoNews.- Rebeca Mora es un ejemplo de lo talentosas que pueden ser las mujeres emprendedoras de Costa Rica. Ella fundó Grupo Wimo, negocio que fabrica, a pequeña y gran escala, productos higiénicos, químicos, cosméticos y biomédicos.
Entre sus logros, en 2018 recibió el Galardón Pyme en la categoría Industria, que entrega el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC) de Costa Rica. Además, en 2020 ganó el INCAE Entrepreneur Award en la categoría Empresa.
Mora se define como empresaria, estratega, incansable, y siempre en la búsqueda de nuevas aventuras y oportunidades de negocio. “Yo soy de las que tocan puertas, lo peor que me puede pasar es que me digan que no”, afirma.
Esta filosofía la llevó a audicionar para el reality show “Escuela Imparables”, producido por E! Entertainment. El programa da a las participantes las herramientas para que puedan potenciar su negocio y llevarlo al siguiente nivel.
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El poder de las mujeres emprendedoras de Costa Rica
Mora ha escrito una historia destacada entre las mujeres emprendedoras de Costa Rica. Cuenta que cuando se enteró del casting de “Escuela Imparables” hizo un video y lo envió. Aunque pensó que no cumplía con el perfil, por ser una mujer que proviene de un país pequeño que estaba en sus 40 años y con un emprendimiento en manufactura.
“No creí que tuviera el perfil, pero como soy de las que no le importa que le digan que no, lo envíe. Y pasé de primera entre las 10 finalistas”, recuerda la emprendedora costarricense.
En el reality recibió mentorías en marketing, branding, mindfulness, entre otras áreas. Además, tuvo la oportunidad de recibir consejo de Silvina Moschini, la primera mujer en Latinoamérica en conseguir que su empresa se convirtiera en unicornio.
“Como única centroamericana sentí la responsabilidad de demostrar que lo único pequeño que tiene Costa Rica es su territorio”, subraya Mora.
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Cambio de paradigma
En Centroamérica cada vez son más las mujeres que emprenden. En este sentido, considera que generacionalmente ha habido un cambio abismal. Por eso asegura que la generación de mujeres de entre 40 y 50 años tiene menos miedo al emprendimiento.
“Ya sabemos que queremos ser la jefa, que podemos ser la jefa y lo que esto nos va a costar”, reflexiona Mora, uno de los múltiples casos exitosos de las mujeres emprendedoras de Costa Rica.
A lo anterior se suman los estragos económicos que dejó la pandemia. También hay que añadir la situación de muchas mujeres en Centroamérica que son el único sustento de la familia y tienen que hacer un valioso esfuerzo por poner el pan en la mesa.
Pero el emprender viene con un alto costo, dice la emprendedora costarricense. “Es un costo tanto emocional como físico, porque muchas veces dejamos de tener tiempo para nosotras como personas”, explica.
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3 reglas de oro para emprender
Después de algunos años de experiencia, Mora tiene varias recomendaciones para las mujeres que quieren formar parte del ecosistema emprendedor:
- Aprender a emprender. Es muy común adentrarse al mundo del emprendimiento sin tener conocimiento de lo que requiere el negocio, sin saber cuáles son las legislaciones que lo rigen.
- Enamorarse de los números. Se puede tener el mejor producto, pero si no se conocen los números, el negocio está destinado al fracaso.
- Ser pacientes. Siempre hay obstáculos que superar.
Como empresaria aún tiene muchas metas por alcanzar. Entre ellas, conseguir que su laboratorio se convierta en fabricante de productos farmacéuticos. Hoy dice no estar lista aún, pero tiene claro que en unos años va a conseguirlo.
Sin lugar a dudas, Rebeca es un caso a seguir entre las mujeres emprendedoras de Costa Rica.
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