POR ISRAEL GUTIÉRREZ (*)
La red 5G, a la que todavía le falta algo de tiempo para llegar a niveles comerciales en varios países de Latinoamérica, es una de las grandes promesas inmediatas de la tecnología, pues permitirá más conexiones a una velocidad que será entre 10 y 20 veces más rápida que la cuarta generación de conectividad celular.
La gran promesa de la red 5G se basa en avances como la telemedicina, pero no sólo limitada a consultas, sino a la posibilidad de hacer cirugías en tiempo real, donde el médico operará con robots, sin siquiera estar en el mismo país que su paciente.
En México, por ejemplo, a diferencia de la mayoría de los países del resto del continente, el desarrollo de la Red 5G todavía está en la fase de inversión, la primera de tres que se requieren para que el servicio alcance a todos los mexicanos, de acuerdo con datos de Statista, al cierre de 2021.
Sin embargo, en A3Sec sabemos que las grandes promesas no son nada sin la ciberseguridad y la 5G no está exenta de riesgos cibernéticos.
Los riesgos cibernéticos generan la necesidad latente de contar con una solución para la postura de seguridad digital, que pueda contrarrestar los ataques en tiempo real.
Retos de seguridad
Una de las grandes brechas de seguridad que se pueden generar para la red 5G es la necesidad de implementar seguridad descentralizada, pues la quinta generación requiere muchos más puntos de enrutamiento de tráfico, lo que complica los controles de seguridad y mantenimiento.
Cualquier área que no sea supervisada puede ser considerada como no segura y comprometer al resto de la red.
La gestión de supervisión será un paso fundamental para consolidar un buen funcionamiento de la red 5G, pues el incremento en el ancho de banda será un reto para la supervisión de seguridad actual, debido al incremento de la velocidad.
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Con las tecnologías anteriores, la supervisión de seguridad en las redes se podía realizar en tiempo real. El gran reto será encontrar esquemas que permitan mantener una vigilancia eficiente en la velocidad y el volumen de datos.
Para los usuarios, la principal brecha de seguridad se presenta en los dispositivos de Tecnologías de la Información, que se multiplicará con la red 5G, pero la mayoría de las empresas que elaboran dispositivos inteligentes de gama baja no ponen especial atención a la ciberseguridad.
Oportunidades a la vista
El incremento de los dispositivos inteligentes en el mundo, abrirá más puertas para que los hackers puedan entrar al resto de la red de las casas de cualquier persona.
Por ello, es necesario conocer todas las especificaciones de seguridad en todo tipo de dispositivos inteligentes que van desde las bocinas, las televisiones, las cerraduras de las puertas, las computadoras y tabletas, o cosas que pueden parecer tan inocuas como los refrigeradores o lavadoras inteligentes con una conexión a internet.
Esto se logra a través del cifrado al inicio del proceso de conexión, que revela información del dispositivo para hacer ataques a otros aparatos inteligentes y permite a los hackers conocer qué tipos de dispositivos están conectados a la misma red para atacar los de su interés de forma específica.
A nivel empresarial, contar con un equipo interno de ciberseguridad resulta costoso y poco eficiente, pues desenfoca la organización, tiene altos niveles de rotación y bajos niveles de efectividad, por lo que en A3Sec sugerimos buscar soluciones a la medida, para lograr la mejor protección de información y datos al interior de cualquier empresa, en especial ante el reto que supondrá la implementación de la red, que está a la vuelta de la esquina.
(*) Israel Gutiérrez es CTO y Co-fundador de A3Sec México.
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