La pandemia de COVID-19 subrayó la importancia crucial de cuidar tanto de la salud mental como la física. Pero, ¿qué implica exactamente tener una salud mental equilibrada?
¿Qué es salud mental? Se define como el estado de armonía entre una persona y su entorno sociocultural, asegurando su participación en actividades laborales, intelectuales y relaciones interpersonales para lograr el bienestar y la calidad de vida. Cuando esta armonía se ve comprometida por enfermedades o problemas mentales, que pueden afectar todos los aspectos del individuo: físicos, mentales y sociales.
Entender y atender nuestras emociones es fundamental. Cada emoción, ya sea miedo, frustración, tristeza o alegría, tiene un propósito y un mensaje para nosotros. El miedo nos alerta sobre el peligro, la frustración nos indica cuando las cosas no van como queremos, la tristeza nos conmueve y la alegría nos conecta con actividades que nos hacen sentir bien.
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Tips para cuidar de la salud mental
- Reconocer las emociones y aceptarlas es el primer paso para permitir que fluyan y encontrar un equilibrio emocional.
2. Mantener un estilo de vida saludable también contribuye significativamente.
3. Dormir lo suficiente, realizar actividad física regularmente, mantener una dieta equilibrada y buscar ayuda médica cuando sea necesario.
4. Centrarnos en nosotros mismos y en nuestras necesidades.
5. Hacer actividades recreativas que nos hagan felices, pasar tiempo con amigos y familiares, desconectarnos de las redes sociales y dedicar tiempo a actividades que nos apasionen, como practicar deportes, ver películas o escribir en un diario.
6. Reconocer cuándo necesitamos ayuda es igualmente importante. No debemos cargar solos con nuestras emociones o problemas durante mucho tiempo. Buscar apoyo en nuestras redes de apoyo y comunicarnos abiertamente con personas de confianza puede ayudarnos a encontrar soluciones y reducir nuestra vulnerabilidad emocional.
Cuidar nuestra salud mental implica entender y aceptar nuestras emociones, mantener un estilo de vida saludable, centrarnos en nosotros mismos y reconocer cuándo necesitamos ayuda. En tiempos cambiantes, es fundamental priorizarla para enfrentar los desafíos con resiliencia y fortaleza.
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