POR MARLENE GUTIÉRREZ
IberoNew. La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) forma parte del ADN de Ternova. Bajo el liderazgo de Rodrigo Tona, la compañía se encuentra en un proceso de transformación que la ha llevado a adoptar el modelo Bussines to Human (B2H), el cual está transformando la RSE en El Salvador.
Dicha filosofía implica tomar el propósito del negocio y llevarlo como un hilo conductor a toda la cadena de valor. Integrando hasta a la última persona que interactúa con el producto o servicio.
“El negocio es sólo negocio si logra conectar con las personas y las necesidades humanas”, señala al respecto Rodrigo Samayoa, gerente de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad.
En 2020 la compañía se convirtió en signataria del Pacto Mundial de las Naciones Unidas, fortaleciendo su compromiso de operar responsablemente.
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Alcanzando hitos de RSE en el Salvador
Ternova es la primera y única empresa carbono neutral en El Salvador. Samayoa explica que no sólo querían compensar su huella de carbono, entonces decidieron trazar una estrategia de reducción de huella, sin afectar la productividad.
“Para nosotros era un hito fundamental, porque uno de los mayores retos que enfrenta la humanidad es el cambio climático” dice el directivo.
Para 2030 la meta es dejar de usar plástico de fuente virgen. Hoy tienen empaques que incluyen desde 30% de material reciclado hasta 100%. Desde InnovaLab trabajan con emprendedores para cocrear soluciones que lleven a mejores y más eficientes desarrollos.
En materia ambiental, también trabajan para ofrecer a sus clientes créditos plásticos para que éstos puedan mitigar su huella de carbono.
“Con nuestra actividad no sólo contribuimos a mejorar el problema del manejo de los desechos sólidos, sino que además estamos contribuyendo con temas de carbono”, opina Samayoa.
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Ciudadanía corporativa
La empresa ha adoptado el concepto de ciudadanía corporativa. Esto, debido a que busca actuar como un ciudadano responsable e involucrarse en todas las acciones y en todas las latitudes donde trabajan.
Al respecto, Irene Alvarenga, jefe de Proyectos de Sostenibilidad, explica que la estrategia de RSE se basa en cuatro ejes: descarbonización, circularidad, comunidades sostenibles y compromiso compartido.
Con base en dichos ejes realizan diferentes iniciativas de voluntariado. Un ejemplo de RSE en El Salvador es el trabajo conjunto que realizaron con la fundación Zoológica (Funzel) para el Programa de Conservación de la Tortuga Marina en Isla Tasajera.
“Cuando el voluntariado conecta con otras necesidades y otro ambiente cambia su enfoque y lleva esos aprendizajes a su entorno, multiplicando los beneficios”, asegura Alvarenga.
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Reciclaje inclusivo
Con Recicla 503 han creado un ecosistema colaborativo por el planeta. A través de alianzas y colaboraciones con diferentes comunidades, instituciones y empresas, recolectan materiales reciclables. Además, mediante capacitaciones y contenido educativo, buscan sensibilizar a la población sobre el reciclaje.
“Fomentamos la cadena de reciclaje y generamos mayores insumos para quienes se dedican a la recolección”, subraya Alvarenga.
A través del Programa de Formación de Microempresas, en conjunto con la Fundación Empresarial para la Acción Social (Fundemas), capacitan a los proveedores para que puedan administrar mejor su negocio.
La compañía también cuenta con procesos de verificación y trazabilidad de los materiales. Esto permite asegurar que dentro de la cadena de valor no haya algo que dañe al medio ambiente. Además, se garantiza que no existan prácticas que generen exclusión o pongan comunidades en riesgo.
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RSE en El Salvador, por un futuro verde
Entre los planes de Ternova en materia de RSE en El Salvador está seguir impulsando la descarbonización. Actualmente están trabajando con Fundación Naturaleza para desarrollar modelos de compensación que permitan crear los primeros créditos de carbono en el país.
Asimismo, tienen contemplado llevar Recicla 503 a otras zonas del país, y con ello fomentar la creación de empleos a través de la iniciativa. Además, quieren continuar impulsando temas de circularidad, solidaridad y voluntariado.
El papel de la RSE es contribuir a que seamos mejores sociedades, a que las personas se conecten, afirma Samayoa. Y agrega: “Que los negocios sean Bussines to Human (B2H), es el gran reto que tiene la RSE en El Salvador. Conectar y buscar soluciones en conjunto”.
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