IberoNews.- Las prácticas enfocadas a la sostenibilidad en materia ambiental, social y corporativo (ESG, por sus siglas en inglés) son una necesidad dentro de las empresas de Guatemala.
Esta tendencia va en línea con lo ocurrido en el resto de América Latina. Por ejemplo, durante abril de este año, Debtwire Par publicó datos sobre préstamos y bonos ESG en la región. El informe de esta consultora denota que la emisión relacionada con ESG creció casi cinco veces, pasando de 10,800 millones de dólares (mdd) en 2020 a 47,600 mdd en 2021.
A continuación, Juan Pablo Morataya, director ejecutivo del Centro para la Acción de la Responsabilidad Social Empresarial (CentraRSE), habla sobre el papel de estas prácticas en las empresas de Guatemala. La institución que representa está llevando a cabo en Guatemala el foro “El cambio está en ti”, los días 20 y 21 de este mes.
La importancia de las prácticas ESG en las empresas de Guatemala
Los reportes en empresas de Guatemala, un índice del avance
El directivo de CentraRSE resalta la importancia de tomar en cuenta los reportes como una forma de iniciar en las prácticas ESG.
“Hemos duplicado el número de empresas en Guatemala que están elaborando reportes de sostenibilidad bajo estándares internacionales, como la Global Reporting Initiative (GRI) u otras metodologías, entendiendo que la transparencia (….), identificar tus impactos, gestionar tu riesgo, sus impactos en sostenibilidad es la mejor práctica”, explica Morataya.
Este tipo de reportes han permitido ver algunos cambios en las empresas de Guatemala. Tal es el caso de la empresa guatemalteca, Cementos Progreso, que en su reporte ESG de julio de este año, indicó que su cemento es uno de los más verdes del mundo, con un factor Clinker de 67.1%. Además, esta compañía usó un 77.5% de energía eléctrica renovable.
A nivel global, por ejemplo, Citi, la compañía de servicios financieros, se comprometió a destinar 1,000 mdd a nivel global a finanzas sostenibles para el inicio de 2021.
Entendiendo el concepto
El papel de las acciones ESG en las empresas comienza a posicionarse como una parte del modelo de negocio. Entender este concepto de esta manera ayuda a que más empresas se beneficien de ello en distintos aspectos.
“Cuando las empresas verdaderamente entienden el concepto de sostenibilidad y dejan de confundirlo con modelos como la filantropía, la caridad o la inversión social, y se entiende realmente como una inversión estratégica en el modelo de negocio, únicamente puede tener como resultados mayor rentabilidad y competitividad”, expresa el director ejecutivo.
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Inversión
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en su división Invest, reportó en julio pasado el crecimiento de las inversiones en ESG. La institución anunció que ha ayudado a empresas de América Latina y el Caribe a obtener cerca de 1,000 millones de dólares en bonos ESG.
Estas cifras denotan la importancia que estas inversiones tiene en la región, pero el gasto debe hacerse de manera inteligente.
“Si una empresa dentro de la estrategia de sostenibilidad, por cada dólar que invierta en esa estrategia, no tiene devuelta como mínimo 3 dólares, no está haciendo sostenibilidad, porque la sostenibilidad, en primer lugar, debe de ser un factor de rentabilidad, de productividad y competitividad”, puntualiza el experto.
El futuro
En lo referente al futuro de las acciones empresariales destinadas al tema ESG, en un futuro inmediato la creación de incentivos en Guatemala podrían significar un impulso.
“Lo que debería de haber es políticas públicas que tengan incentivos para las empresas que sí lo están haciendo, los incentivos en materia de sostenibilidad se vuelven muy importantes, porque entonces es una manera de promover a las empresas que voluntariamente están haciendo esto”, detalla el directivo de CentraRSE.
A nivel mundial
El papel de las acciones empresariales en pro de la sostenibilidad se vislumbra con un futuro en crecimiento, de acuerdo con un estudio de Pictet Asset Management y del Instituto de Finanzas Internacionales realizado en febrero de 2022. Ese informe proyecta que la emisión mundial de bonos ESG se cuadriplicará y será de 4.5 billones de dólares para 2025.
Pero, además de esto, la importancia de la sostenibilidad a largo plazo se plantea como vital para la sociedad.
“Las decisiones políticas y empresariales que se tomen en los próximos cinco años van a ser decisivas para la Agenda 2050 (… ). En la agenda de sostenibilidad van a ser los años determinantes en cómo, como sociedad, vamos tomando las decisiones para preservar la especie, pero también para preservar el planeta”, concluye Morataya.
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