Por Elaine Miranda
Ahorrar por ahorrar no funciona. Esa idea de “guardar lo que sobre” es una receta para la frustración, porque casi nunca sobra. Y cuando lo hace, es tan poco que da más ganas de gastarlo que de guardarlo.
La clave para ahorrar con éxito no está en cuánto ganás, sino en tener una meta clara que te mueva. Porque cuando sabés para qué estás ahorrando, el “cómo” se vuelve más sencillo.
- Definí tu meta con nombre y apellido. No es lo mismo decir “quiero ahorrar” que “quiero ahorrar $500 para el viaje a Antigua con mis amigas en noviembre”. Mientras más específica, mejor. Le das un rostro y una fecha al objetivo.
- Convertí esa meta en una cuota mensual. Si necesitás $500 y tenés cinco meses, tu cuota es de $100 mensuales. Así ya no es una idea vaga, es una tarea con fecha y número.
- Automatizá tu ahorro. Si esperás a ver si sobra, probablemente no pase. Mejor apartalo en cuanto te pagan. Si usás banca en línea, programá una transferencia automática a una cuenta aparte, sin tarjeta, sin acceso fácil. Tu “yo” del futuro te va a agradecer.
- Creá un fondo visual. Poné una imagen de tu meta como fondo de pantalla, en tu billetera o pegada en la pared. Visualizar lo que querés te ayuda a mantener el enfoque cuando aparezca una tentación.
- Celebrá los avances. Cada vez que alcanzés una meta, celebrá. El ahorro también puede ser disfrutable. Eso refuerza el hábito y te da motivación para la siguiente.
Ahorrar con propósito es pagarle a tu yo del futuro con el esfuerzo del presente. Y cuando esa meta llega, no solo tenés el dinero, tenés el orgullo de haberlo hecho posible.
No se trata de vivir limitado. Se trata de vivir con intención.
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Elaine Miranda es experta en finanzas personales, autora del libro Mujeres y Finanzas y fundadora de Plata con Plática, la plataforma de educación financiera más leída de Nicaragua y pionera en Centroamérica. Ha impartido más de 1,500 conferencias en empresas de toda la región y ha sido reconocida por FORBES y Estrategia & Negocios como una de las mujeres más influyentes del istmo. Su misión es ayudar a las personas a tomar control de su dinero con herramientas prácticas, empatía y sin excusas.
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